¿Cómo purgar tus radiadores?
1. Apaga la calefacción
Antes de comenzar a purgar los radiadores, es importante apagar el sistema de calefacción y esperar a que se enfríen. Esto no solo evita quemaduras accidentales por contacto con el radiador caliente, sino que también facilita el proceso, ya que el aire atrapado tiende a subir cuando el sistema está frío.
2. Localiza la válvula de purga
En la mayoría de los radiadores, la válvula de purga está ubicada en la parte superior del radiador, generalmente en uno de los extremos. Esta válvula permite liberar el aire atrapado en el sistema, lo que mejora la circulación de agua y optimiza la eficiencia del radiador.
3. Coloca un recipiente debajo
Al purgar el radiador, es probable que salga un poco de agua junto con el aire atrapado. Para evitar derrames en el suelo, coloca un recipiente o un trapo debajo de la válvula de purga para recoger el líquido que salga durante el proceso.
4. Utiliza una llave de purga
Con una llave de purga (o en algunos casos, un destornillador de punta plana), gira la válvula en sentido contrario a las agujas del reloj de forma suave. Escucharás un silbido, que es el aire escapando del sistema. Mantén la válvula abierta hasta que el silbido cese y comience a salir un chorro constante de agua.